Si te acercas a Arrikrutz por el desfiladero de Jaturabe tendrás una pista de lo que te encontrarás en la cueva: un mundo kárstico se abre ante tus ojos, un lugar al que te adentras a través de una carretera vertiginosa que cae, literalmente, en picado. Este desfiladero esconde uno de los valles más recónditos de Gipuzkoa, y por ello se convirtió en un refugio excepcional para guerrilleros carlistas y fue pasillo de contrabandistas durante la Guerra Civil.

A medio camino entre Oñati y el Santuario de Arantzazu, en el corazón de la cordillera de Aizkorri, encontraremos nuestra cueva, un laberinto subterráneo de casi 15 kilómetros de galerías distribuidas en 6 pisos superpuestos. Estalactitas, estalagmitas… el tiempo, junto con los ríos subterráneos Aldaola y Arantzazu, ha ido creando formas imposibles que hacen que la cueva sea una auténtica catedral barroca del subsuelo.

Cuando el clima era mucho más frío de lo que es hora, Arrikrutz era un refugio excepcional para los animales que habitaban estos parajes, muestra de ello son el esqueleto de león de las cavernas y el yacimiento de osos que se han encontrado en su interior.

Hoy en día podemos visitar una de las galerías de la cueva, tiene unos 390 metros de longitud y desciende 55 metros. La visita es apta para todos los públicos, aunque también se ofrecen visitas para los más aventureros, si es tu caso te recomendamos que te informes antes de ir de las fechas en las que se ofrecen. Si por el contrario, lo que quieres es una aventura en familia, también hay visitas diseñadas especialmente para los más txikis de la casa.

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CENTRO DE INTERPRETACIÓN ARRIKRUTZ

Si quieres conocer más a fondo el Karst del parque natural de Aizkorri - Aratz, la historia espeleológica de Oñati o a los animales que viven en Arrikrutz en la actualidad te recomendamos que visites el centro de acogida al visitante, donde te explicarán todo lo que quieras saber.

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RUTA DE LOS CONTRABANDISTAS 

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Si quieres completar tu visita a la cueva de Arrikrutz con una ruta a pie por los parajes más karstico de Gipuzkoa te recomendamos la Ruta de los Contrabandistas, recorrerás los mismos senderos por los que hace ya unos años los contrabandistas pasaban todo tipo de mercancías.

Una vez en Oñati tenemos que tomar dirección Arantzazu por la carretera GI-3591, enseguida notaremos que la carretera empieza ascender y cada vez se vuelve más serpenteante. En el km3 tenemos que coger el desvío de la derecha que indica Araotz. A 1,2 kilómetros está el aparcamiento y la senda peatonal que llega hasta las cuevas.